Certificación en Sistemas de Gestión de Calidad

Certificación en Sistemas de Gestión de Calidad ISO 9001 en México

Los sistemas de gestión de calidad son imprescindibles para alcanzar el buen funcionamiento de una organización. También son necesarios en cualquier actividad que implique la producción de bienes y servicios.

En particular, es muy importante obtener una certificación ISO 9001 si tienes una empresa radicada en México. Esto mejorará el funcionamiento interno de la organización. Además, demuestra a los futuros clientes un nivel superior de seriedad y compromiso con la calidad.

Sigue leyendo para enterarte de qué se trata esta certificación y cómo obtenerla.

¿Qué es la certificación en sistemas de gestión de calidad?

En primer lugar, hay que saber que, cuando hablamos de sistemas de gestión de calidad, aludimos a estrategias de organización.

Principalmente, se trata del trazado de un plan respecto a todo aquello que pueda aumentar el agrado del cliente. Asimismo, ese planeamiento también apuntará a asegurar que se cumplan los objetivos principales de la empresa.

A su vez, la gestión de calidad implica comprometerse a realizar controles regulares para poder llevar a cabo mejoras constantes y necesarias. En ese sentido, se trata de una herramienta sumamente eficaz para mejorar las organizaciones.

¿Qué aspectos abarcan?

Existen diversas formas de idear un sistema para controlar la calidad. Eso dependerá de las particularidades de cada empresa. Sin embargo, es posible listar algunos aspectos esenciales a los que atender, que no se pueden dejar de lado.

  • A la hora de poner en práctica este sistema, se deben determinar claramente las actividades requeridas por el producto que se ofrezca. Esto incluye actividades o procesos destinados a controlar el buen funcionamiento de los demás.
  • Estrategias. Se debe reflexionar sobre la manera de llevar a cabo los procedimientos. Siempre con el fin de ofrecer una mejor experiencia al cliente y lograr su satisfacción completa.
  • Aclarar cuáles son los recursos disponibles. Esto incluye los recursos financieros, los recursos materiales (equipos, maquinarias, materias primas) y el personal requerido.
  • Estructura jerárquica. Se debe organizar al personal según funciones claras y posiciones jerarquizadas. De esa manera, se determinarán los límites de la responsabilidad y la autoridad de cada integrante. También se establecerá una dinámica particular para la comunicación interna.
  • Documentación. Puntualizar qué documentos o formularios legales son necesarios para el desarrollo eficaz de la organización. Luego, verificar que todos estén correctos y al día.

Finalmente, hay que evitar que lo que se determine en relación con estos aspectos se contradiga con las metas de la empresa. Es decir, se deberá revisar que el plan a seguir sea concordante con los objetivos para que sea funcional a la organización.

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¿Qué son las Normas ISO 9000 y 9001?

Se denomina Normas ISO a la suma de las normas concebidas por la Organización Internacional de Normalización (ISO). Esta institución no gubernamental se dedica a crear estándares internacionales.

En el caso que nos compete, las Normas ISO 9000 fijan aquellos estándares que tienen que ver con el control de calidad. Es un grupo de criterios estandarizados según los cuales se determina, en cada organización concreta, si la calidad está optimizada.

En particular, las ISO 9001 suscitan un modelo único para estandarizar los sistemas de gestión de calidad. Son funcionales a las organizaciones o actividades que se enfocan en ofrecer bienes y servicios de cualquier índole, sin importar su rubro o su tamaño. Son las únicas cuyo cumplimiento se puede certificar.

Estas normas se rigen por un principio fundamental que se caracteriza con el acrónimo PHVA (Planear, Hacer, Verificar y Actuar). Así, no se trata solo de realizar un plan, sino de llevarlo a cabo efectivamente y luego evaluar sus resultados para determinar si es necesario realizar modificaciones o mejoras.

¿Cuáles son sus principios fundamentales?

Más allá de las necesidades exclusivas de cada organización, las ISO se rigen por siete principios esenciales. Estos están en concordancia con las otras Normas ISO y fueron establecidos desde la última actualización, en el año 2015. Veamos cuáles son:

  1. Orientación hacia el cliente. Como explicamos anteriormente, el objetivo final de la calidad es la satisfacción íntegra del cliente. Por ese motivo, sus características y requerimientos serán tenidos en cuenta.
  2. Dentro de la estructura jerárquica de la empresa, todos aquellos que estén a cargo de otras personas (sea cual sea su posición) deberán asumir su liderazgo. Esto implica adoptar una actitud segura que motive al equipo.
  3. Todo el personal de la empresa debe sentirse comprometido con los objetivos fijados.
  4. Orientación hacia procesos. La dinámica de trabajo se organizará según los procesos correspondientes a cada sector.
  5. Mejora continua. Una vez determinados los procesos, estos se evaluarán continuamente, siempre poniendo el foco en la posibilidad de mejorarlos.
  6. Decisiones por evidencias. Las decisiones dentro de la empresa se tomarán con base en los resultados reales y concretos que hayan sido verificados.
  7. Gestión de las relaciones. Se procura optimizar, de manera sistemática y planificada, las relaciones interpersonales. Esto tanto al interior de la organización como en el caso de relaciones externas (trato con clientes y proveedores, por ejemplo).

¿Qué beneficios conlleva tener una certificación ISO 9001?

Si bien no es un requisito obligatorio, contar con esta certificación otorgará grandes beneficios a tu empresa. Fundamentalmente, el proceso productivo mejorará notablemente y de manera continua. A mediano plazo, esto significará un mejor funcionamiento general y, por ende, un aumento de las ganancias.

Otro aspecto esencial es la optimización de la experiencia del cliente. Hoy en día es difícil lograr la satisfacción íntegra de un cliente, ya que hay demasiada oferta en el mercado y, por ende, mayores exigencias. Un sistema de gestión de calidad te ayudará a ofrecer bienes y servicios destacados. A su vez, la certificación en ISO 9001 contribuirá a aumentar tu reputación y generar confianza en el cliente.

Pasos a seguir para obtener una certificación ISO 9001

Si deseas obtener una certificación en sistemas de gestión de calidad ISO 9001 en México, tendrás que asumir el desafío. Hay que tener cuenta que implica una inversión (de tiempo y recursos), pero que dará sus frutos.

Primeramente, hay que ofrecer al personal de la empresa capacitaciones respecto a la gestión de calidad, sobre todo a los directivos y responsables. Por otro lado, es necesario analizar el estado de la empresa y programar auditorías internas.

Luego, se activará el sistema de gestión de calidad para corroborar si resulta de utilidad. En este punto hay que mantenerse alerta para poder corregir los errores que se presenten o mejorar lo necesario. Si es posible, será beneficioso realizar una segunda auditoría.

Cuando se considere acabado, el sistema debe registrarse. También es importante documentar cada paso que se haya dado en pos de la gestión de calidad. Esos documentos serán las pruebas que luego se presentarán a los profesionales encargados de la auditoría de certificación.

Aunque seas líder o miembro de una organización, es posible que no te sientas capacitado para resolver todas estas cuestiones. No te preocupes. Afortunadamente, existen empresas que concentran sus esfuerzos en la capacitación y certificación para normas ISO en México. Están integradas por numerosos profesionales con experiencia en el tema que estarán dispuestos a guiarte en cada paso.

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